Desde este jueves en el cine y, desde el viernes, en Disney+ premiere access. “Espero que vean la verdadera fortaleza de Natasha, como nunca se la vio”, dijo la protagonista, Scarlett Johansson. Por primera vez, una película del universo cinematográfico de Marvel es dirigida por una mujer: Cate Shortland.
Scarlett Johansson hizo su debut en el Universo Cinematográfico de Marvel en 2010 con Iron Man 2, pero hoy, más de diez años más tarde, el público conocerá la historia de Natasha Romanoff fuera de Los Vengadores. Black Widow, de Marvel Studios estrenará este jueves en las salas de cine (funciones en el Paseo Aldrey a las 16.40 y 19.30 en español, a las 17.40 y 20.30 subtitulada -sala Atmos- y desde este viernes, a las 15 en castellano en sala Atmos). Además, desde este viernes, estará disponible en Disney+ a través de Premier Access.
Por primera vez, una película del universo cinematográfico de Marvel es dirigida por una mujer: Cate Shortland.
En Black Widow, Natasha Romanoff confronta las partes más oscuras de su historia cuando surge una peligrosa conspiración vinculada a su pasado. Perseguida por una fuerza que no se detendrá ante nada para destruirla, Natasha debe enfrentar su historia como espía y las relaciones dañadas que dejó en el camino mucho antes de convertirse en una Vengadora.
La historia comienza inmediatamente después de los sucesos transcurridos en Capitán América: Civil War. Durante una pequeña rueda de prensa Johansson recordó que, como agente, Nastasha siempre formó parte de un “todo más amplio”: de la Habitación Roja, de Shield, o de Los Vengadores. Siempre formó parte de una unidad o familia temporaria, pero “después de Civil War, todo quedó destruido. No queda nada. Y por primera vez en su vida, está sola”.
Esta situación presentó ciertos desafíos que intrigaron a Johansson. “Ella no tiene que regresar a nada –comentó Johansson–. Y eso es bastante aterrador cuando uno estuvo adosado a algo durante tanto tiempo”.
“Cuando la encontramos al comienzo de la película, ella está quebrada –expresó Johansson– y el objetivo es que, hacia el final de la película, ella se recomponga, pero de una manera diferente a la de antes”.
Aunque Black Widow, ahora fugitiva, siempre fue autosuficiente, con conexiones en todas partes, finalmente se le presenta la oportunidad de desandar sus pasos, pero ¿podrá?
Florence Pugh, David Harbour, Rachel Weisz, O. T. Fagbenle, William Hurt y Ray Winstone completan el elenco de la esperada producción.
Para Johansson, era importante que la película no tuviese como objetivo explicar sus orígenes. En sus conversaciones con el productor Kevin Feige y el productor ejecutivo Brad Winderbaum, llegaron a la conclusión de que esa línea de tiempo era el mejor momento de la historia de Natasha desde el cual comenzar el relato.
Se dieron cuenta de que querían explorar la relación entre la Natasha Romanoff de Johansson y la Yelena de Florence Pugh. Johansson no tenía ningún interés en una historia de “dos mujeres compitiendo entre ellas, tratando de derrotarse, de destronarse”. En Black Widow se ve el amor compartido de una relación de hermanas.
Johansson reflexionó sobre cómo había sido el crecimiento del personaje en estos últimos diez años, y cómo había estado intrínsecamente conectado a su propio crecimiento en las películas de Marvel Studios y por qué había valido la pena esperar hasta ahora para contar su historia. “Esta película hubiese sido muy diferente si la hubiéramos hecho hace diez años. Estoy muy agradecida de que haya sido ahora”, reconoció.
Johansson notó que los cambios se deben, en parte, a que cumplió 35 años y fue madre, y ahora su vida le da sustancia a los papeles que quiere interpretar y a las historias que quiere contar.
“Natasha tiene mucha compasión”, afirmó Johansson antes de señalar que probablemente no hubiera sido uno de los rasgos de su personaje que ella hubiese enumerado durante Iron Man 2 o The Avengers. Pero “esa compasión es lo que impulsa muchas de sus decisiones; esa parte de ella me conmueve”, reveló Johansson.
A Johansson le agradó explorar esta evolución y este aspecto de Natasha con cada uno de los directores con los que trabajó, y contó que su experiencia con la directora Cate Shortland fue “liberadora” porque Shortland no tiene ningún problema en explorar a fondo “lo feo, o lo que se percibe como feo, vergonzoso o incómodo”.
“Espero que vean la verdadera fortaleza de Natasha, como nunca se la vio”, concluyó Johansson.